Fotos de vestigios de la Antigua Roma, tomadas en distintos lugares (ciudades, yacimientos arqueológicos, museos, etc.). También información sobre lo que se viene publicando al respecto.

sábado, 25 de marzo de 2023

Hispanorromanos importantes pero poco conocidos (2)

Monumento a Quintiliano en Calahorra

Marco Fabio Quintiliano nació en Calagurris (actual Calahorra, en La Rioja) en el año 35 d.C. Pronto marchó a estudiar en Roma. Volvió a su ciudad nata para ejercer de abogado, hasta que el emperador Galba (Servio Sulpicio Galba) lo reclamó en Roma donde empieza una brillante carrera de abogado y profesor de retórica. Bajo el imperio de Vespasiano (Tito Flavio Vespasiano) se hace cargo de la primera cátedra pública de retórica que ocuparía durante 20 años. Domiciano lo nombra tutor de sus sobrinos-nietos, En su escuela de retórica se formaron Plinio el joven, Tácito y el joven y futuro emperador Adriano. Se retiró en el año 89 a Calagurris donde escribió su “Institutio oratoria” por el que se hizo famoso hasta el hundimiento del Imperio romano. En 1416, se rescató la obra integral en la abadía de San Galo (Suiza). Fue traducida y divulgada con gran éxito durante el Renacimiento. Más que un tratado de retórica se lo considera como un programa educativo completo.

Ya en su momento defendió la existencia de una escuela pública.

 

Marco Valerio Marcial nació en el año 40 en Bilbilis (cerca de la actual Calatayud, en Aragón). Fue contemporáneo de Séneca, Lucano y Quintiliano. Pronto viajó a Roma al amparo de la familia Séneca. Marcial se dio a conocer con sus epigramas. En el período del emperador Tito compuso un libro de epigramas con motivo de la inauguración del Anfiteatro Flacio (el Coliseo). Posteriormente obtuvo un gran apoyo del emperador Domiciano. Gozaba de tal popularidad que el emperador mandó 4 pretoriano que lo acompañaran para protegerlo de sus admiradores. Tras el asesinato del emperador optó por volver a Hispania. Gracias a la ayuda económica de una viuda rica y de su amigo Plinio, consiguió una casa en Bilbilis  donde pasó el resto de su vida.

La totalidad de su obra ha llegado hasta nosotros. Durante el Renacimiento fue recuperado y ensalzado. Grandes de la literatura hispana, como Quevedo, Cervantes o Baltazar Gracián, lo mencionan o utilizan sus epigramas.

 

Marco Cornelio Nigrino Curiacio Materno nació en el año 40 en Edeta (actual Lliria, en la provincia de Valencia). Proviene de una rica familia local que explota minas de lapis specularis usado en la antigüedad como cristal para las ventanas, por ser translúcido. Hace una gran carrera militar, iniciándola siendo nombrado tribuno militar de la Legio XIV Gemina Martia Victrix destinada en Britania y posteriormente en el Danubio. Nigrino fue ascendiendo y  consiguiendo innumerables distinciones militares, siendo el emperador Vespasiano el único que lo superó. Fue gobernador de Galia Aquitania y posteriormente de Siria. Fue senador y Cónsul suffectus. Pero al ser designado Trajano hijo adoptivo y sucesor de Nerva, cae en el olvido y desaparece del panorama de la Urbs. Se recupera su memoria gracias a algunas inscripciones fragmentarias aparecidas en su pueblo natal en una especie de homenaje póstumo.

 

Busto de Teodosio

Flavio Teodosio o Teodeosio I llamado el grande nació en el año 347 en Cauca (actual Coca, en Segovia). Tras la derrota de Adrianopolis, en la que murió Valente, el emperador de Oriente, Graciano, emperador de occidente llamó a Teodosio quien salvó la situación. Para agradecérselo lo nombró emperador de oriente cuando tenía 32 años. En 394, acabó siendo también emperador de occidente, siendo el último emperador del Imperio Romano. Durante su reino decretó el Cristianismo Católico (Universal) como única religión oficial del Imperio Romano

Una excavación destapa una tumba de época romana en Mazarrón (Murcia)


Artículo de Miguel Rubio publicado hoy en el periódico “La Verdad”.

 “Un solar entre las calles Era y Corredera de Puerto de Mazarrón, a pocos metros de la fachada marítima, acaba de revelar seis siglos de historia. Capa a capa, la excavación arqueológica de la parcela, donde se ha proyectado un edificio residencial, ha arrojado pistas de cómo evolucionó a lo largo del tiempo esta zona del núcleo urbano próxima a otros yacimientos de relevancia, ambos visitables: la factoría de salazones y la casa romana de la calle Era. Los restos más antiguos documentados –y la principal sorpresa para los investigadores– corresponden a una inhumación de cronología tardorrepublicana o altoimperial (siglo I antes de Cristo).

En la sepultura. excavada en la misma roca del cerro, se han encontrado dos ánforas a modo de ajuar funerario, algo poco frecuente. Una de ellas, en un excelente estado de conservación, corresponde a la tipología Ovoide 5, lo que ha permitido datar la tumba. Según los técnicos consultados por LA VERDAD, este tipo de cerámica se producía en el Valle del Guadalquivir, y en la Región apenas si se han encontrado piezas de estas característica, por lo que el hallazgo tiene una importancia especial para la investigación arqueológica.

A partir de este primer nivel, la excavación ha ido mostrando nuevos estratos de etapas posteriores, prácticamente unos encima de otros, desde el siglo III al VII después de Cristo. Así, han aflorado viviendas de época tardorromana con dos momentos diferenciados: uno relacionado con la construcción de estos espacios domésticos y otro (desde mediados del siglo IV a inicios del V) que tendría que ver con el uso y renovación de esas estructuras residenciales.

En la siguiente capa, los trabajos han detectado, debido a la presencia de escorrentías, que la zona quedó abandonada durante un tiempo, aunque no está claro qué pudo ocurrir. Más que a una catástrofe natural, las primeras hipótesis apuntan al clima de inseguridad de aquel momento histórico.

No obstante, después se recuperó el asentamiento, como ha demostrado la aparición de restos de silos (para guardar grano y fruta) y otras construcciones. Los dos últimos niveles han arrojado un depósito con viviendas y estructuras de almacenamiento de un periodo comprendido entre los siglos VI a VII, ya en época altomedieval.

La mayoría de las estructuras y materiales localizados (incluida una parte de un pavimento de 'opus signinum', un mortero de cal para recubrir superficies) afloró «muy fragmentado». El asentamiento quedó casi arrasado hacia el año 1860 porque la ampliación de la fundición La Esperanza se realizó sobre esta parcela de la calle Corredera. Según apunta la investigación realizada, el terreno se removió entonces y los materiales se aprovecharon como relleno con el fin de nivelar el promontorio. El impacto de estos trabajos «supuso la desaparición de gran parte de la seriación estratigráfica y la ruptura de las relaciones entre los distintos niveles». No obstante, las piezas recuperadas durante la excavación se custodiarán en la sala arqueológica de Puerto de Mazarrón y todos los restos ya han quedado documentados.

Tras completar los estudios arqueológicos, el promotor podrá seguir adelante con el proyecto para levantar el edificio de viviendas. El servicio regional de Patrimonio Histórico considera que el yacimiento carece de interés para su conservación, aunque no ha ofrecido a este diario justificación alguna de los motivos. Pese a la autorización para desmantelar las estructuras que quedan en la zona, una portavoz de la Consejería de Cultura señala que el constructor deberá contar con supervisión arqueológica a la hora de continuar con los desmontes «para controlar los restos que puedan quedar al descubierto». Así se lo han comunicado dicho departamento al Ayuntamiento, que ahora deberá velar para que se cumpla este requisito.”

domingo, 19 de marzo de 2023

Hispanorromanos importantes pero poco conocidos (1)

Fueron muchos los Hispanorromanos que destacaron en la Roma antigua, sin embargo fuera de los más conocidos, como los emperadores Trajano y Adriano y el filósofo Séneca, se sabe bien poco de los demás. Incluso aunque se conozcan, no se sabe que son de origen hispano.

Voy a intentar dar un repaso, poco a poco, para ir recordando estos lejanos paisanos nuestros.

 

Lucio Cornelio Balbo, conocido como “Balbo el viejo” (para diferenciarlo de su sobrino “Balbo el joven”). Nacido en Gades (actual Cádiz) en el año 95 a.C. y procedente de una familia rica, fue colaborador y amigo de Julio César, Pompeyo y Cicerón entre otros. En agradecimiento por su contribución en la guerra sertoriana, Pompeyo concedió la ciudadanía romana para él y su familia. Participó en diversas campañas con Julio César como praefectum fabrum (responsable de logística). En el año 45 a.C. solicitó a César la ciudadanía romana para todos sus conciudadanos gaditanos. Gracias a él Gades fue declarada ciudad romana. Tras la muerte de Julio César, y bajo el mandato de Octavio Augusto, fue elegido Cónsul en el año 40 a.C., siendo el primer cónsul no itálico.

 

Monumento a Lucano en Córdoba

Marco Anneo Lucano, sobrino del filósofo Séneca, nació en Corduba (actual Córdoba) en el año 39. Siendo él un bebé, su familia se trasladó a Roma. Su educación corrió a cargo del propio Séneca. Fue enviado a Atenas para profundizar sus conocimientos clásicos. De vuelta a Roma fue incluido como poeta en el círculo de amistades de Nerón. Terminó publicando escritos críticos hacia el tirano. Debido a su participación en una conjura contra Nerón, fue encarcelado, torturado y obligado a suicidarse con sólo 26 años de edad. Es famoso por su obra “Bellum civile” más conocida como “La Farsalia”, un poema épico sobre la guerra civil entre Julio César y Pompeyo, que sólo pudo publicarse entera tras la muerte de Nerón.

 

Monumento a Columela en Cádiz

Lucio Junio Moderato “Columela nacido en Gades (actual Cádiz) en el año 4 d.C., es reconocido por sus publicaciones sobre agricultura. Dos de sus publicaciones más conocidas que han llegado hasta nosotros son “Liber de arboricus” (Libro de los árboles) y “Res rustica” (La labranza). Éste último consta de 12 libros dedicados a la agricultura, avicultura, ganadería, apicultura, mantenimiento de una hacienda, cuidado de la tierra, etc. Es el libro sobre agronomía más completo escrito en la Antigüedad. Ha sido reeditado en latín durante la edad media hasta el siglo XVIII. Es traducido al árabe desde el siglo IX. Su publicación al español data de 1824.

 

Monumento a Osio en Córdoba


Osio de Córdoba nacido en Córdoba en el año 256 (ó 257). Fue obispo de esa ciudad desde el año 294. Fue consejero para asuntos eclesiásticos de Constantino I el Grande. Con el fin de combatir distintas herejías, principalmente el Arrianismo, se le encargó en el Concilio de Nicea la redacción de la profesión de fe conocida como el “Credo”. Desde entonces, los Católicos lo siguen recitando en misa. La Iglesia Ortodoxa y la Católica de Rito Oriental lo veneran como santo confesor.